Volví a ver “Amelie” esta semana; sólo la había visto una vez y fue hace algunos años, así que me acordaba apenas de que era una chica un poco rara.
Amelie fue una niña sobreprotegida por sus padres sin más amigos que un pez que acabará devolviendo a un río y, al hacerse mayor, se va a vivir a París. Un día encuentra casualmente en su casa una pequeña caja muy escondida donde un niño había dejado sus más preciados juguetes 40 años atrás, así que decide “ir en busca de esa persona y entregarle la que fuera su más preciada posesión; si se da el caso de que el hombre se emociona al volver a verlo, Amelie dedicará su vida a ayudar a la gente, si no, pues nada”. ¿Lo adivináis?
Si; se emociona al reencontrarse con el niño que había sido.
Pues bien, comienza a ayudar a las personas que le rodean: vecinas y vecinos, compañeras de trabajo, clientes de la cafetería, a su padre… Y así se encuentra con un chico que colecciona ¡fotos que la gente tira en los fotomatones! Amelie se enamora en el instante en el que descubre el álbum con todas esas fotos y le ayuda a desentrañar el misterio del hombre que se hace fotos en todos los fotomatones de la ciudad.
Es muy divertido cuando su padre comienza a recibir postales de un enanito de jardín, y lo loco que está el exnovio de su compañera, apuntando todos los gestos amables que ella le hace a los clientes, con fecha y hora incluidos.
En conclusión; me ha encantado volver a verla; me he reído muchísimo.
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A mí Amelie en su conjunto no me convenció demasiado, pero sí me hizo bastante gracia lo que tú mencionas: Lo de los enanitos de jardín que viajan por el mundo. Y también muy interesante lo del hombre que se hace fotos por todos los fotomatones de la ciudad y después las rompe.
¿Sabes que le habían ofrecido el papel a Emily Watson? ¿te la imaginas haciéndolo? A mí no me pega mucho.
Un beso
Pues no lo sabía y no pega mucho, la verdad, pero bueno, igual nos ponen a otra y no nos pega nadie más en el papel, ¡a saber!
Sí que tiene unos cuantos puntos graciosos y, el resto de la peli, es para ir dejándose llevar por un sinfin de cosas incomprensibles como, por ejemplo, que el chico más modosito del mundo trabaje en un sex-shop!
Chicas, a mi esta película me pareció tediosa. No entendía casi nada y no me hizo reir, debía estar en un mal día, pero ni la chica me convenció.
Saludos
Teresa
¡¡ISI!! ¿Qué has hecho con los posts de tu anterior blog? Lo digo porque quería volver a probar tu receta de la tarta de queso y cometí el error de no apuntármela. La miré directamente por internet mientras la hacía. Si puedes decirme donde encontrarla o enviarmela te lo agradecería.
Sobre la peli, una vez intente verla pero no logré durar muchos minutos, me pareció rara y sin gracia. ¡Que se le va a hacer!
Bueno, a mí me pareció muy graciosa, aunque todas las cosas que suceden son inverosímiles. Igual es verdad eso de que hay que pillarla en buen momento…
Hilario: te escribo la receta en tu blog, espero que no cante mucho… Lo vas a hacer en el día del padre, a que si????
A mi me pareció muy reconfortante la voz del narrador. 😉
Y a mí muy reconfortantes los ronquidos del espectador que estaba a mi lado… 🙂 Bueno, aunque me voy acostumbrando 🙂 🙂
A mí me gustaron unas cosas más que otras, como en tantas pelis.
Mucho las dos que he dicho, la del enanito de jardín y el fotomatón, poco su venganza al frutero, que la vi un pelín…. francamente/sinceramente (Gomaespuma’s).
Qué importante es ver una película en un momento u otro, verdad? Yo vi “Cuatro bodas y un funeral” con dolor de muelas, y no me gustó mucho que se diga (habría que verla de otra manera, supongo).
Y también porque no todos tenemos el mismo sentido del humor, no sólo es el momento (supongo).
Bueno, Isi, para mí Amelie fue una experiencia muy singular, en aquellos momentos influyó mucho en unos guiones que escribía, porque me impresionaron los recursos técnicos que emplearon en la realización. De modo que guardo un agradable recuerdo de ella. En Cuba, todos los años, hay un Festival del cine francés, donde proyectan los últimos filmes y algunos anteriores. Para mí es una fiesta, porque además de encontrarlos muy buenos, de romper con la aburrida filmografía americana, de encontrar muchos puntos de contacto con el sentido del humor de los cubanos, además de disfrutar todo eso, este Festival ocurre a una cuadra de mi casa,
entonces no me pierdo ni una película.
Recuerdo que el día que proyectaron Amelie, previamente comentada en la prensa, el cine estaba abarrotado, había personas sentadas hasta en el suelo de los pasillos.
Gracias por este buen comentario. Me sorprendió agradablemente.
ADE
Bueno Adela, por lo menos hay alguien que comparte mi opinión sobre lo divertida que es esta película.
Debe ser genial que haya festivales de cine en el lugar donde vives; en mi ciudad no hay nada parecido. A ver si este año puedes ver la película “juntos, nada más”, que también es francesa y está basada en el libro del mismo título (es de Anna Gavalda), que a mí me ha encantado, te la recomiendo.
saludos!
Pues seguro que no me la perderé… mil gracias!
ADE
me encanta esta película!!!
Coincidimos en esta película, Ismael.