Convertir el tiempo en oro (estilo lector)
6 May 2010 por Isi
Ocurre algo extraño. Esta mañana caminaba hacia la junta entre los chispeos de medio-nieve que caían cuando, de repente, ya había llegado a mi destino; fui a correr por la tarde y, al darme cuenta de que me estaba cansando, ya había batido mi récord de la semana pasada; me puse a hacer la comida para los próximos días y al instante no sólo la tenía hecha, sino que además me había dado tiempo a limpiar el polvo.
El paso del tiempo es subjetivo, como todos sabemos, y sólo se nos pasa rápido cuando:
a) estamos absortos en algo (obviamente cortar verduras no requiere toda mi concentración, por si lo estábais pensando).
b) nos lo estamos pasando bien.
c) las dos respuestas anteriores son correctas.
(Esto es porque me estoy preparando para un examen tipo test que tengo en junio)
¿Ya habéis adivinado a qué se debe el que pueda convertir las tareas más odiosas en suspiros? (la foto ayuda).
Bien: he descubierto los audiolibros.
Lo primero que hice fue convertirme en pirata hasta que pasé un par de libros al ipod. Durante el proceso, os recomiendo comprobar que la voz es humana porque, al parecer hay un programa de lectura -de nombre Loquendo, creo- que puede convertir un párrafo de cualquier libro en una pesadilla para nuestro cerebro. Luego está el tema del idioma y del acento; y es que muchos libros están en español latino y tienen acento que hacen que te parezca un poco raro (yo es que si oigo mucho rato por ejemplo el canal andalucía, me dan mareos, jejeje, así que me considero muy susceptible a los acentos). Y, por último, hay que comprobar que la última palabra de la última pista es fin; esto lo digo porque me ha pasado de bajar uno a medias que encima me estaba gustando.
Hago un inciso para decir que el ipod es mi segundo amor después de mi mac, que ahora es el macho dominante.
Bien, una vez en el ipod, con voz humana, entero y en español, lo siguiente es ponerte a escucharlo. Parece mentira que podamos prestar atención mientras vamos por la calle o hacemos cualquier cosa, pero a mí no me ha resultado nada complicado. Es como que te cuentan un cuento; a veces incluso te desesperas porque quieres que vaya un poquito más rápido en algún capítulo interesante.
Sin duda lo mejor es que el tiempo pasa volando: que corres, ni te enteras; que llevas una hora planchando, no te lo crees; que acabas de limpiar toda la casa, estás deseando hacer algo más como excusa para no parar la narración… De momento he de reconocer que estoy escuchando bestsellers porque quise asegurar que la historia me enganchara y no me despistara pensando en otras cosas, y la verdad es que están funcionando como deseaba.
Me está gustando la experiencia, lo confieso, y en breve aparecerá alguna reseña de algún libro que he escuchado. He mirado en la biblioteca pero tienen poquísimos, así que por el momento sigo siendo pirata.
¿Alguien más ha probado?
Yo sólo probé con los audiolibros de poesía, a poder ser con el propio autor. Te recomiendo los de Ángel González, aunque sé que no te gusta la poesía.
¡Ja,ja! Ayer lo hablaba con una amiga. Resulta que ella va todas las tardes a andar por la playa y lleva en su orejas música (no se si de Britney o no) pero yo le comentaba que si fuera a andar me bajaría un audio libro, pero hasta ahora los que he oído son con acento “disney” (latino). A mí también me cuesta mucho acostumbrarme a los acentos en general, así que prefiero que el libro vaya en españolito normal a ser posible. De todos modos no tengo ningún aparatillo con que escucharlos, aunque ahora que lo pienso tengo una tarjeta de 8GB que me vino con el teléfono y lo mismo hasta podría hacer un apaño, pero la verdad es que en general no me gusta llevar nada en las orejotas, ya son ellas solas bastante llamativas ¡je,je! Por cierto ¿qué librillos tienes en formato audio?
Isi, me encanta la idea. Lo malo es que me tendría que comprar un ipod para llevármelo a la calle.
Tengo lector de libros, que es una maravilla (te vas de viaje, y ni siquiera te tienes qué planificar qué vas a leer, te los llevas todos).
En fin, lo de los acentos a mí también me parece importante, porque si no, puede ser que me encuentre perdiendo el hilo de lo escuchado, pensando en ¡pero, qué mal suena, porque pronuncia asó la L o la S …. !
Lo del pirateo, a mí no me importa pagar, es más lo pefiero, porque el escritor tiene que poder vivir de sus obras para poder seguir creando. En el caso de las tiendas de libros virtuales, poco a poco van saliendo más, el Corte Inglés por ejemplo ya ha dado un pasito.
A mí me atropellarían por la carretera o las bicis por la calle jajajaja con lo despiste que soy no me lo puedo permitir 🙂
Anda, yo ni siquiera me lo había planteado… aunque como dices, es una forma de aprovechar el tiempo mientras haces otras cosas, en esos momentos me suelo poner música, que crea el mismo efecto.
Además, no sé si yo prestaría la suficiente atención como para enterarme de algo…
En cuanto a los acentos, al final te acostumbras. Por ejemplo, yo al principio no me enteraba de nada del acento andaluz y ahora tengo el oído muy hecho. El problema con el español latino puede ser el uso de palabras distintas que aquí no conocemos.
¡Saludos, reina de la conversión del tiempo en oro!
Pues yo a lo máximo que he llegado es a llevarme al gimnasio la Constitución Española en audio, pero grabada por mí misma, con lo que me conozco ya el acento, jaja. Muy entretenido no es, francamente XDD En el caso de otros audiolibros, yo opino como Vero, que con lo mucho que me concentro correría el riesgo de que me atropellaran o caerme por algún lado por no prestar atención. Me da miedito 😀
saluditos
xGaztelu los ha probado, eso lo sé.
Parece muy-muy interesante, además yo me mareo si leo en el bus, y solo puedo leer en el metro.
Yo tengo un mp4 normalito ¿cómo/dónde puedo conseguir uno? Si quieres, contéstame al mail
Ah, a mí tampoco me gusta el “acento neutro” como lo llamaban, cuando era pequeña se oía en series de televisión y por supuesto en las pelis Disney, y no lo echo nada de menos.
Eso sí, todos aprendimos que a los delincuentes, en USA los llamaban “pillos”
pd. ¿Loquendo tiene algo que ver conmigo? Otro que me plagia
Creo que tenía un post por alguna parte sobre los Audiolibros. En EEUU están ampliamente difundidos, no sé si porque hacen trayectos más largos en coche o qué. El caso es que lo he intentado sin éxito y seguramente es porque no lo uso para tareas básicas sino que, en el caso de podcasts, trato de estar en el pc navegando y escuchándolos al tiempo y como mi cerebro no es mac acabo perdiendo la atención en una de las dos tareas. Algún día probaré a limpiar la casa con un bestseller en las orejas a ver si tengo más suerte xD
Fernando: pues no lo había probado. Investigaré a ver si así le cojo gustillo a la poesía o por lo menos entiendo algo jeje.
Booki: pues para andar y correr va estupendamente, te lo digo yo. Hombre, la música también, pero es que esto te mantiene más distraída y no te das cuenta de que te cansas. Mujer, que no creo yo que los cascos te hagan las orejas más grandes. Pues anda que si te llegas a apellidar como yo 😀
AVISO: hoy estuve en el súper y tuve que apagar el audiolibro, porque entre darle a la tecla de pesar los tomates y buscar como una loca las dichosas anchoas, perdía el hilo. Fin del aviso.
Icíar: pues bueno, vale un mp3 normal, lo que pasa es que si te compras un ipod, luego los mp3 normales te parecen una mierda. Yo te lo digo porque tuve.
Los acentos es verdad que piensas más en como están diciendo las palabras que en lo que están diciendo. Supongo que será cuestión de acostumbrarse, como todo.
Vero: yo si no he tenido percances leyendo por la calle, mucho menos escuchando, pero si eres propensa… no sé yo… De todas maneras todo es probar 😉
Lahier: jo, no me nombres reina, que ya no sé dónde meter todos los títulos que me otorgan últimamente (princesa de los marcapáginas, duquesa de los postres…). Pues te animo a que pruebes; yo también pensaba que me iba a costar prestar atención, pero todo lo contrario. Te engancha más que la música.
Lillu: calla, que también he pensado en leerme los apuntes y grabarlo, pero es que no!! Hay que guardar las distancias. Aparte de que odio oír mi voz grabada, correría el riesgo de dormirme por la calle o algo. No no, ni lo intento!
Loque: tienes que probar!! luego te mando un mail, que tu mp4 vale lo mismo, porque lo que yo me bajo en realidad son pistas de audio igual que las de música.
Loquendo no es como tú: él nos odia y por eso habla así para hacer de una novela amena la peor de tus pesadillas.
Elwen: sería la leche leerlos en inglés, pero claro… si leyendo no me entero, no te quiero ni contar.
Claro, tienes que usarlo para hacer cosas monótonas y aburridísimas, si no, no creo que funcione. Ya he avisado de que en el súper, en cuanto tienes que pensar en qué pasillo está algo, ya la liaste.
Pero vaya chulada!!! y de dónde los sacáis? no tenía ni idea!!! ayuda! 😉
Isi, yo he comprado audilibros para regalar pero nunca los he oido yo. ¿Cómo los bajo?. ¿Dónde los encuetras?, ya puedes informarnos.
Siempre nos enseñas cosas nuevas, qué bien
Un saludo
Teresa
Lectoradetot: te contesto por email maja.
Teresa: pues prueba, di a la gente que te los grabe, que algunos títulos son muy difíciles de encontrar! De todas maneras, te acabo de mandar un email.
Mmmm. Mi abuelita me contaba que le encantaba escuchar sus radionovelas. Creo que a ella le servirían más los audiolibros; total, no tiene que estar como yo llevando para todos lados un libro + papel + lápiz a mina (así sea una lectura ligera) para las anotaciones de rigor, ni le encanta repasar frases, demorar o apurar el ritmo de la lectura (además que eso de hacer dos cosas a la vez, por muy monótonas que sean, me impediría seguir la ilación de lo narrado).
Eso sí, los audiolibros deberían implementar más funciones: voces de toda edad y sexo; tonos variados (la del narrador omnisciente debería ser todo lo neutral posible), etc., etc. Por lo pronto, he apreciado (en un texto pequeño) que se pueden diferencias los diálogos. ¡Vamos bien!
Recuerdo mis CDs e incluso casettes de poesía -y algo de narrativa breve- con la voz de sus propios autores (Neruda, Borges, Cortázar, Octavio Paz, Martín Adán, etc.), todos los que menciono son latinoamericanos, pero ni el argentino, ni el mexicano menos el chileno o el peruano (ya no te dijo el limeño) hablan con acento parecido; de ahí parte de la riqueza del idioma.
Sorry por el embrollamiento,
R.
¡Buenas!
A mí me encanta escuchar la radio (ya os conté algo en una ocasión) y lo cierto es que esto de los podcasts ha supuesto una revolución para poder escuchar programas interesantes en cualquier momento. En mi caso, que no soy tan afortunado como tú o Azote y mi reproductor tiene una capacidad más limitada, lo cierto es que incluir audiolibros o podcasts supone “comerse” buena parte de la memoria y tener que ir renovando los contenidos muy frecuentemente, pero merece la pena.
En el caso concreto de los audiolibros me ocurre como a ti: prefiero la voz humana a la de Loquendo (u otros lectores “virtuales”) aunque hice unos intentos con él el cuatrimestre pasado para grabar algunos temas de ciertas asignaturas e ir escuchándolos por la calle o en el transporte público. También soy asiduo a los podcasts en inglés (muy particularmente a los tecnológicos, que tienen que ver con mi profesión) y los que está recuperando RNE en voz de Félix Rodríguez de la Fuente me encantan. Respecto a los acentos, no me importa escuchar a Cortázar con acento latinoamericano, por ejemplo, pero sí me resulta mucho más chocante que pongan voz a Delibes o Poe, por ejemplo. Respecto al andaluz, no me toquéis el acento, ¿eh? 😉 Bueno, que me salgo del tema, jeje.
Tengo algunos audiolibros en voz de su propio autor (Borges, Cortázar, Cela, Delibes…) en CD, y me gusta mucho escucharlos cuando viajo. En particular, el Historias viejas de Castilla la Vieja me encanta.
Algo que también puede gustaros es el “radioteatro”. No hace mucho RNE presentó una locución radiofónica de “Psicosis” de lo más interesante.
En fin, que me encanta este “aprovechar el tiempo” y disfrutarlo como un tesoro, máxime en los tiempos que corren donde todo… ¡vuela!
Un besote.
R.: está claro que para tu manera de leer, esto no va bien 😉 Quizás si fuera algún relato corto, pero claro, una novela entera, pues no. Lo de apuntar, siempre puedes tener un papel a mano, pero no, no creo que sea tan cómodo como cuando lees.
Lo que me decís de las narraciones y poesías leídas por los autores, pues he de reconocer que no los conozco ni me los he topado por ahí buscando otros audiolibros, pero creo que voy a probar porque me parece que va a estar bien.
Lo de los acentos (y esto va para todos): es que los que no tenemos nos suena taaaaan raro. Ejemplos:
– A veces en la tele sale una presentadora con acento y me choca un montón.
– Algún libro, como el de Laura Restrepo que, leído, también me choca.
Pero ya digo que soy muy susceptible y me suena demasiado raro.
En cuanto a las voces, estoy de acuerdo. Bueno, pirateando no se puede exigir, pero por ejemplo me he bajado uno narrado en primera persona en el que el protagonista es mujer… y está leído por un hombre 🙁
Homolibris: ya sé que te gusta mucho lo de la radio, pero la verdad es que yo nunca he sido de escuchar la radio. De todas maneras, bajarte los podcasts es una buena manera de escuchar los programas que te interesan sin pillarte con el horario. Yo todavía no he probado con los podcasts en el ipod, lo confieso, pero Mork sí y le prestó un montón.
Lo de saber inglés ¡menuda pasada! porque en inglés supongo que estén todos los libros del mundo, incluyendo seguramente las novedades. Pero bueno, yo me atrevería a leer, pero a escuchar ni lo intento.
Lo del acento, ya te digo lo que a R., es que los que no tenemos pensamos más en lo raro que pronuncian las palabras que en lo que están diciendo en realidad.
Oye, que me está gustando mucho esto de ir escuchando libros por ahí. Voy a hacer una confesión que hasta ahora sólo he compartido con Elwen: estoy escuchando Crepúsculo. ¡Y me está gustando! 😀
Isi, ¿cómo que no tenéis acento? Te digo yo que sí, que tengo un compañero de Burgos que tiene un acento del norte que no veas… Lo que pasa es que a cada cual el suyo le suena a “sin acento”. Yo tengo varios: el de mi pueblo y el de andaluz universal. Azote, el primero de ellos, no lo entendía cuando nos conocimos. Y es que ni el inglés, ni el francés, ni el alemán o el árabe tienen parangón si los comparamos con el santaferino… 😀
Bueno Isi, cada día tenemos más cosas en común (¿Nos conoceremos y no lo sabemos?, jeje) Leonesas, nos gusta leer y con gustos más o menos parecidos, tenemos el mismo Ipod y hemos descubierto hace poco los audiolibros!! A mi tampoco me gustan nada esos con voz tan enlatada, como no sea voz humana, no me gustan. Yo empecé probando y estoy con él, con los Pilares de la Tierra, porque ya lo había leído, y quería empezar con algún libro que ya hubiese leído, para probar, y estoy enganchadísima. Lo oigo en el coche de camino al trabajo, por la calle, mientras cocino o limpio… Incluso en la ducha si lo pongo muy alto también (porque aparte de mi fabuloso y amado Ipod, tengo una base de altavoces)
Tengo ya en cola también El juego del Ángel, y alguno más. Por cierto, no sé si los tienes como formato mp3, yo los pasé a m4b, que es el formato de los audiolibros y te mantiene el minuto y segundo donde vas “leyendo” (te lo comento porque yo al principio me volvía loca si intercambiaba música con audiolibros o con podcast)
Besitos paisana!
Una forma de aprovechar el tiempo muy interesante, y si además en para leer (oír) un libro, mejor que mejor.
No conocía esto de escuchar libros, pero de dónde los bajas, y cómo? Te veo muy puesta en tecnología punta.
Examen en Junio?
Homo libris: que no, que lo mío es “si adornos”! jajaja. Anda, que tener dos acentos eso ya es el colmo! ¿os entenderé a Azote y a tí el día que os conozca? 😉
Marta: pues hija, deberíamos conocernos 😀 Pues muchas gracias por la información, ya que veo que hay en el ipod “audiolibros”, pero nunca se me había ocurrido pasar el mp3 a ese formato que, por otra parte, sería el correcto para escucharlos. El finde me pongo con ello. Muchísimas gracias!
Luci: no seas pelotera, que yo de tecnología punta ya sabes que no tengo ni idea. Me los busco en google, como ya he dicho, sin olvidar de poner lo de la voz humana.
Hola Isi!
Es curioso que la semana pasada hiciese pruebas con el programa de loquendo, pero …, no me gustó el resultado. Y he recordado, mientras leía tu entrada, que tengo un amigo que trabaja para la Organización Nacional de Ciegos de España, ellos ya hace muchos años que utilizan un sistema de gravación de voz de voluntarios para sus socios; a mi me gusta andar y siempre llevo puesto mi MP3 con radio o grabaciones de escritos míos, para ver el efecto del sonido, ya que normalmente son poemas, o inclsuo mis programas de radio para hacer autocrítica (jejeje), pero esto de poder planchar, cocinar o andar, escuchando un llibro, Ummm, hablaré con mi amigo y os cuento que sistema tienen y si su “biblioteca” es accesible a todos.
Un abrazo !
Ay Susana, por favor cuenta a ver qué te dice, o si quieres coméntanoslo en tu blog, que ya estoy yo al loro del tema.
Por otra parte, anímate a escuchar libros, ya verás qué gozada!
Un saludo!
Yo he leído/oído varios audilibros y es todo un invento, una solución estupenda para aprovechar un montón de ratos tontos (los atascos y los medios de transporte públicos son mis favoritos).
xG
Cierto es, suena a lo de radionovelas por entrega. Yo solía desayunar con alguna que otra novela negra hace unos años…
También tengo casetes (!¡) por casa con cuentos de Edgar Allan Poe y otras lecturas adaptadas de los viejos tiempos cuando hacía mis primeros pasos en ingles;) Ahora me iría bien lo mismo para el franchute.
Creo acordar que me apoderé de “Twilight” en inglés hace algún tiempo, pero no me acabó de gustar, quizás porque ya casi me lo conocía de memoria.
Me has dado para pensar… No quisiera cometer ningún delito, pero igual y me atrevo a buscar algún libraco en formato audio para probar que tal sienta.
Por cierto hay algún tipo en novela en concreto que recomendáis¿? O más bien funciona con todo¿?
Yo solo he probado audio libros de la biblioteca tipo Angel Acero: “Relajación Guiada” “Bienestar” “relajación profunda” y cosas así. La verdad es que me han parecido muy interesantes. Cojo los CDS, hago “una copia de seguridad” en el disco duro y después lo paso directamente al MP3 que, por si alguien no lo sabe, es heredado de Isi, porque se trata del que desechó cuando se pasó al Ipod.
Me gusta la idea de escuchar un audiolibro cuando salga a correr, por lo de olividarse del cansancio.
Para pasar el aspirador, yo sigo recomendando música.
Lo de los acentos es muy interesante. No me importaría volver a escuchar aquellas voces de las series americanas dobladas en sudamérica, con aquel puritanismo americano (del norte): “Caramba Juancho, qué bueno que viniste” o aquél imposible: “Recórcholis John, grasias por acompañarme, ¿podrías ayudarme a entrar esas bolsas en la casa?” y el otro con acento mejicano: “Arriba las manos, quedas detenido, se acabaron tus días de pillo en esta siudad”.
En fin, enternecedor.
xGaztelu: ya sabía que tú los utilizabas, y veo que son más maravillosos aún si es que vives en Madrid 😉
Karo: ¡todavía no puedo recomendarte nada! Si es que soy nuevecita en esto jajaja. Yo he probado con 2 best sellers y bien, pero supongo que si no son best sellers, pues también te engancharán. Crepúsculo sí me ha enganchado, lo que pasa es que yo no lo había leído ni visto la peli; de hecho todavía me pregunto por qué narices son vampiros y no les afecta la luz (no tardaré en averiguarlo 😉 ).
Yo ya os digo que con lo del inglés me da una envidia… supongo que en ese idioma se pueden encontrar todos los libros.
quiet man: jajajjajajajaja creo que si escucháramos eso corriendo, nos moriríamos de risa y
a) haces abdominales al reírte mientras corres
b) te paras (esta es más probable)
bueno, ya te pasaré alguno a ver si te gusta o no 😀
A mi los audiolibros no me servirían…no puedo atender a otra persona hablando mucho tiempo 🙂 En la universidad estudiaba sola ya que comprendo las cosas cuando las leo para mí misma y no cuando le leo a otro o cuando me leen a mí… taras que una tiene. Los de los audiolibros están muertos conmigo 🙂 Y con respecto al acento (aquí le decimos tonada) seguro que debes tenerla, y, como dice Homo Libris no la escuchas. Cuando me mudé a Buenos Aires podía identificar rápidamente a mis comprovincianos: eran los que no tenían tonada!! (según mi oido por supuesto).
saludos,
Pues no lo había escuchado… Mmm tengo que ponerme más al día. Probaré a descargar alguno y de momento lo pasaré al Mp3 o al móvil ¿se podrá? Así me entretengo en el autobús porque leer cuando voy en un coche, tren… me marea un montón 🙁 ¡Besos!
Hola!!! Pues interesante entrada esta sobre los audiolibros. La verdad que, aunque los conocía, no he probado aún con ninguno, quizás una de las razones es el miedo a que no le preste la atención adecuada si tengo que estar pendiente de otra cosa, pero después de tu experiencia puede que me anime, por lo menor, a probar.
Besos!!
yo comencé a escucharlos en mi ipod, que conectaba a la camioneta para evitar estresarme en mis labores de mamá-chofer, y buscaba audiolibros en inglés para que mis hijos practicaran y no se les olvidara ese idioma (acababa de sacarlos de una escuela de total inmersión al inglés, a una que sólo llevan una o dos horas a la semana). ¿Dónde los compraba? audible.com, por internet, y tienen también en español.
a mí más que libros me gusta ir oyendo unos de una compañía que se llama The Teaching Company, que son conferencias sobre distintos temas: la edad media, neurociencias, los romanos, mitología, etc.
Pero sólo los escucho cuando voy yo sola porque ya te imaginarás que con los niños se quieren bajar del carro (prefieren en suicidio a escuchar eso…jajaja)
Soledad: es que no es sólo el acento, es también cambiar la C por S y todo ese tipo de cosas que a mí me dejan KO. Y bueno, si no puedes concentrarte, claro que el tema no es para tí 😉
Pero podrías probar…
Marina: se puede perfectamente al móvil (el mío no, porque no es tan moderno, pero cualquier otro vale). Prueba, que seguro que te gusta.
María: ya te digo que es para hacer cosas muuuy monótonas; yo no puedo hacer la compra y escucharlo a la vez, pero sí cocinar o limpiar. Anímate.
Ale: qué gracia lo de preferir el suicidio 😀 no me extraña, tiene que sonarles interesantísimo.
Ya ves que no eres la única usuaria: homolibris también está al tanto, y yo estoy empezando jeje. Ahora lo del inglés para mí sería imposible, ojalá pudiera tener ese nivel.. en fin…
Un beso!
Como Susana hace tiempo que conozco este sistema aunque no lo he usado mucho, y lo conozco porque yo tambien tengo un amigo virtual ciego como a el le gusta que le llamen, ya que le repatea lo de invidente, y me contaba que los bestsellers lo oig en audiolibro porque en braille le era imposible. En fin que mi problema es que me molestan y mucho los auriculares no los aguanto asi que igual pruebo porque me aburro mucho limpiando y si imprime marcha habría que hacerlo pero no se lo que aguantaria
por dios Isi no lo he usado nunca, no mucho, si no mi comment suena incongruente
Carmina: ¿y quién no se aburre limpiando? por dios, si es que lo odio! Bien, lo de que te molestan, yo creo que es acostumbrarte: te digo que a mí al principio hasta me hacían pequeñas rozaduras, pero ahora mis orejas se adaptan perfectamente 😉
oye, pués yo támpoco me he estrenado en esto de los audiobook y si lo he pensado, probaré con alguno a ver si me meto, y mientras se limpia como tu dices pués mira, aunque he de confesar que me encanta la musica y bailotear mientras hago cosas, así que no sé si lo cambiaré puedo alternar…
Saludos!
jajaja Sonia, bueno parece que te lo pasas bien con música, que ya es decir mientras se limpia o plancha 😉
Como ando pillada de tiempo me salto parte de los comentarios -luego sigo leyéndolos.
Isi,así que un título más. ¡Qué conste que Inma está haciendo honores a obtener un marquesado con tanta gordez que nos pone últimamente!
Bueno, a lo que iba. Como Homo Libris, pensé en el radio teatro.Cuando leí la entrada pensé: ¡Uf! No sé si me gustaría; pero luego, se me ocurrió que también puedes sentirte como cuando te cuentan una historia.
¡Tomo nota!
Y lo del acento es cierto. Nosotros no lo notamos pero los “de fuera” si.
Hola Isi
he caido en tu blog por casualidad y me al leer esto mi primera reacción, como con el ibook ha sido de rechazo, pero luego, terminando tu comentario he dicho: pero, con lo q me gusta leer y muchas veces me quedo a medias por hacer otras cosas… ¡esto es una maravilla!. Creo q lo voy a probar; además me recuerda a las antiguas telenovelas habladas de la radio, me recuerda a casa de mi abuela!
Merci!!
Lammermoor: es como que te cuentan una historia. Yo te prometo que voy por la calle y me da pena cuando he llegado a los sitios, porque me apetece saber un poquito más…
Bueno con el acento 😉 ¿qué me dices de las ces convertidas en eses? ¿eso sólo lo noto yo???
Eloise: bienvenida, luego echo un vistazo a tu blog. A mí me está encantando, te lo digo de verdad. Yo nunca he escuchado las novelas en la radio, pero vamos, supongo que es lo mismo, sólo que lo puedes escuchar donde quieras.
Lo mejor es probar y descubrir si va contigo lo de escuchar la historia.
Saludos!
Vi la entrada, me pareció interesante, pensé en probarlo, colaboré con el sistema de descargas pirata, me bajé unos cuantos para escuchar..y …mal!!! Un acento horrible!!! Todos los que bajé eran en español, pero con acento inglés…Indícame, direccióname, ¿Dónde?
Besos, guapa!