La prisionera de Roma, de José Luis Corral
21 Jul 2011 por Isi
Este es uno de los libros que enseñaba hace poco entre mis nuevas adquisiciones. Me gustan mucho las novelas históricas pero, por casualidad, siempre acabo leyendo alguna ambientada en la Edad Media, además de casi todos los de Cristian Jacq, y ya iba siendo hora de cambiar y aprender un poco de la época romana.
La novela nos cuenta la historia de Zenobia, una chica de 14 años de tal belleza que el gobernador de la ciudad de Palmira la toma como segunda esposa pese a ser hija de un comerciante y de una esclava egipcia. Palmira fue una rica ciudad construida alrededor de un oasis y situada en la actual Siria pero entoces, a mediados del siglo III, pertenecía al imperio romano. Odenato, el gobernador de Palmira, es un jefe militar que organiza varias incursiones hacia el este contra los persas, por lo cual obtiene el reconocimiento del emperador y le da ciertos poderes sobre la parte oriental del Imperio.
Zenobia y Odenato tienen hijos y este acaba por repudiar a su primera esposa y otorgar a la bella Zenobia todos los derechos que se le suponen a la mujer de un gran gobernante. Pero Odenato muere asesinado y su hijo y heredero es demasiado pequeño, así que es ella la que asume el mando de la ciudad de Palmira y de los territorios orientales del imperio romano. Es una época convulsa para los romanos debido a los numerosos alzamientos en muchas regiones del vasto imperio, sobre todo en el norte de Europa, así que Zenobia aprovecha esta situación: pactará un acuerdo de paz con los persas, contra los que había luchado Odenato tantas veces, para evitar más ataques y así poder conquistar Egipto, presentándose allí como la sucesora de la mismísima Cleopatra. Zenobia se proclama emperatriz de oriente y reina de Egipto, que ahora formará parte del imperio de Palmira. Bajo su dominio, la ciudad crecerá y la riqueza de sus ciudadanos irá en aumento gracias a que se convierte en un punto clave en las rutas comerciales del desierto; además dos grandes generales son leales a Zenobia y entrenarán a su ejército para combatir a posibles invasores (romanos, se entiende).
Pero cuando el emperador Valeriano reduce a los usurpadores del norte del imperio, se dirige con todas sus legiones hacia Palmira. Por muy bien entrenado que esté el ejército que capitanea Zenobia nada puede hacer ante tantos legionarios, así que todos sabemos cómo acaba esto por el título del libro: Palmira es arrasada, los territorios orientales son reconquistados y Zenobia pasará a ser propiedad de Roma; será mostrada como trofeo y el emperador la casará con uno de sus senadores para mantenerla vigilada. Su sueño terminó relativamente pronto.
Lo que queda del templo de la diosa Bel en Palmira
Pese a lo interesantísimo de la historia que nos cuenta, el libro no me ha gustado nada. Las primeras 400 páginas son un verdadero suplicio (¡la primera mitad del libro!) porque todo va muy lento y apenas hay acción; cuenta cómo Odenato va de cacerías y viaja una y otra vez hacia Persia y los persas se rinden nada más verlos, así que en realidad es bastante repetitivo y no sucede gran cosa. El autor se ciñe tanto a la bibliografía que los personajes acaban siendo monigotes: en ningún momento sabe uno cómo piensan y sienten, tan solo tenemos información de sus rasgos más notorios (Odenato adora a Zenobia porque es muy guapa, Zenobia no ama a su esposo pero siente un gran respeto por él y los generales Zabdas y Giorgios están enamorados también de Zenobia), que incluso a veces son algo contradictorios. Las conversaciones brillan por su ausencia y, de hecho, primera conversación (y única) que tiene Zenobia con uno de sus hijos está en la página 600, así que os imagináis que nada sabemos de los lazos que la unen a su propia familia.
Se nota que el autor quiere presentar a Zenobia como una gran soberana que luchó por su imperio, pero al final yo me he quedado con la sensación de que se pasó de lista, ya que bastante honor era heredar los títulos de Odenato para que encima se le antojara ser reina de la mitad del mundo. Los toques de humanidad que le quiere dar el autor son precisamente contradicciones: ella se empeña en conquistar medio imperio porque sí y luego se lamenta de que no tiene tiempo para el amor… Es para decirla: “hija, si lo tenías todo ya, menuda falta te hacía desafiar a Roma y encima nos quejamos…” Total, que el personaje no me ha convencido. Y ya os digo que esto son pequeñísimas líneas que nos quieren dar a conocer en momentos puntuales a los personajes, porque en la mayor parte del libro no sabemos apenas nada de nadie. De hecho hay reacciones de Zenobia que te dejan KO porque no esperabas que fuera tan tonta.
La cuidad de Palmira, hoy en ruinas, con su teatro romano en el centro de la imagen
Como decía, la primera mitad es muy aburrida y, a partir de entonces, cuando llega Valeriano con sus legiones, la cosa se pone bastante emocionante durante algunas páginas más para volver al sopor anterior hasta terminado el libro. Una vez más, el autor acaba siguiendo la bibliografía tan al pie de la letra que ni siquiera es capaz de darle un nombre al segundo esposo de Zenobia, al que simplemente llama “el Senador”, dado que en los libros de historia no se ha conservado su nombre. Es una pena que un libro tan extenso sobre una mujer tan magnífica haya acabado siendo un tostón, y no se me ocurre otra cosa que recomendarle al autor, con todos mis respetos, que tome algo de ejemplo de los autores de best-sellers del momento para que una novela con personajes históricos se torne divertida, dinámica y cercana; de esas a las que devoras sus páginas sin enterarte en lugar de tener que armarte de fuerza de voluntad para leer un capítulo más.
En definitiva: que no lo recomiendo. De hecho mi padre tiene varios títulos más de este autor que en principio me parecían interesantes, y él dice que son amenos, pero ahora dudo que me anime con ellos… Le pongo un 2 por la parte romana de la historia, que fue lo único que me gustó, y soy muy benévola.
Imágenes: Templo de Bel, Teatro romano.
Me había fijado en él porque me gusta la Edad Antigua aunque como tú al final siempre acabo leyendo más novelas históricas de otros periodos. La verdad es que creo que yo no habría tenido la paciencia suficiente para terminarlo: detesto profundamente que una novela histórica parezca más una biografía que una novela como tal. Para mí es importantísimo que el autor sepa ponerse en la piel de los personajes y transmitirnos emociones, de nada me sirve una amplia documentación si me deja fría en esos aspectos y encima es aburrido.
Besos.
Me había fijado en este libro pero después de tu reseña creo que lo voy a dejar pasar. La novela histórica es de mis géneros favoritos y de la época romana creo que no he leído nada, quizás me anime con los de Colleen McCullough que dicen que están muy bien
un beso!
Pues ya has tenido mérito de terminarlo con lo aburrido qye te estaba resultando y lo tocho que era!
Mejor lo dejo pasar.
Besos
Rusta: en efecto, se puede escribir una novela histórica mucho más amena con la cantidad de información que tiene el autor, pero a mí me ha parecido muy lenta, demasiado ceñida a la bibliografía y aburrido. Vamos, que ni para entretenerme; me costaba ponerme con el libro y leer un capítulo más.
En todo caso, mi padre me comenta que ha leído otros libros de este autor (menos tochos) y que le han gustado. No sé si probaré, pero vamos, los temas de sus novelas sí que me atraen.
Tatty: yo también intentaré leer algo más de otros autores, a ver si me gusta y me entretiene, porque la verdad es que sí presta saber qué emperador reinó en tal siglo y contra quién tuvo problemas, etc. Esas cosas de historia me prestan, pero necesito que me las cuenten de manera amena.
Laky: pues sí, hija, encima es bastante tocho y las 100 páginas interesantes están a la mitad, más o menos… A ver si con otro autor tengo más suerte.
Pueees… no me lo apunto. No me va demasiado la histórica y si encima lo pintas así, menos todavía! ¡Uno que me ahorro! ¡Un besazo!
Nada, otro que no apuntamos, a mí es que me me aburren bastante los libros históricos si no son muy amenos. Besos.
Creo que este no entra en mis planes, bastante aburrido es ya lo que estudio, como para leer novelas aburridas… nada que este no se viene conmigo.
Isi:
pues deberían darte un premio por terminar un libro si en las primeras 400 páginas no te está gustando…yo con menos lo habría dejado, sin dudar. Me ha gustado que te tomes el trabajo de contarnos por qué no te ha gustado y que hicieras tu reseña tan bonitas (¡Oye, esas fotos! 😀 )
le daré un respiro a mi plan infinito, que ya es bastante infinito…
Un beso,
Ale.
Pues no creo que me anime y mira que la novela histórica me suele gustar. Pero cuando los personajes están bien caracterizados y podemos ver sus sentimientos, emociones… Entre tanto rigor histórico un poquito de aportación personal y darle más vida a los personajes siempre hace la novela más amena. Si quieres animarte con el mundo romano y aún no te has leído nada de Colleen McCullough, prueba con esta mujer. Tiene una saga que es una maravilla, aunque su último libro decayó un poco. Pero el primero es magistral. El primer hombre de Roma se titula. Impresionante.
Besotes!!!
que pena porque tenía una pinta….
a mi me pasa un poco lo que a ale ultimamente, si veo qe no paso de la página 40…lo dejo!
besotes
Lady: pues mira, mejor para ti. Hombre, lo único bueno es que sí he aprendido cosas (ya de primeras he “conocido” Palmira, por ejemplo), pero vamos, que no me ha gustado esta lectura.
Vero: entonces no, este no te iba a gustar. Si alguien quiere saber qué pasa con Zenobia, que me lo pregunte y listos, se ahorra 800 páginas aburridas 😉
Carmina: pues sí, hija, me ha costado terminarlo y ponerme con él cada vez que iba a leer, así que no os lo recomiendo para “desconectar y divertirse”.
Ale: la verdad es que lo único bueno del libro ha sido conocer Palmira y luego buscar por la red las fotos de las ruinas, que me parecen espectaculares. Pero vamos, que la historia en sí ha sido acabarla a fuerza de voluntad, porque no me estaba gustando nada. Iba leyendo con la esperanza de que mejorara un poco, pero fue demasiado poco lo que mejoró en los capítulos intermedios… en fin, por lo menos ahora estoy leyendo otro que me gusta mucho más 😀
Margari: tomo nota de la autora, de la que no he leído nada. ¿Sabes? yo me esperaba algo parecido a Chrisitan Jacq pero ambientado en Roma: este autor siempre me ha encantado y los personajes históricos los hace de carne y hueso. Pero nada, los de La prisionera de Roma no tienen fondo; no se sabe lo que piensan, no entiendes las reacciones de Zenobia… En fin…
Sonia: a mí es que me da pena dejarlos a medias. Me tengo que aburrir muuuuucho, o sea, que lleve 2 días sin leer porque no me gusta el libro o algo así. Me consuelo diciendo que por lo menos tengo cosas que argumentar cuando lo termine, para explicar por qué no me gustó 😀
Ya había visto este título varias veces, y no suscitaba en mí ningún tipo de interés. Después de leer lo que comentas y de ver la puntuación final, creo que lo dejo pasar definitivamente.
¡Besos!
Yo no he leído este de Palmira, pero me he leído varios de José Luis Corral: “El caballero del templo”, “Numancia”, “El triunfo de la Luz”, “El cid” “Trafalgar” y alguno más que no me acuerdo. Y todos me han gustado, especialmente el de Numancia, que es de la época romana en hispania sobre el cerco y conquista de la ciudad. Es verdad que se ciñe siempre lo más fielmente posible a las fuentes históricas pero a mí me parece ameno. Este que citas lo han lanzado como si fuera un best seller, ahora que triunfan tanto los libros tipo la catedral del mar y otros. En fin, yo sí me atreveré a leerlo, en contra de la opinión de todos…., aunque fijo que no es un best seller. Para eso ya están los pilares de la tierra.
Jesús: pues si ya no te interesaba antes, ahora menos! A otra cosa entonces 😀
Querido padre: ya te dije que me sorprendió que los que tú has leído fueran tan amenos porque la verdad es que con este me he aburrido la mayor parte del tiempo… Como que no les da ninguna gracia a los personajes, no sé.
Hombre, también hay bestsellers que he encontrado aburridos (La mano de Fátima es el mejor ejemplo), pero en general son divertidos. Es que de verdad que a veces me costaba ponerme a leer 🙁 Bueno, en todo caso, la semana que viene te lo presto. A ver si a ti te gusta más!!
Uhmmm pues no me llama mucho la verdad. Si de 800 páginas las primeras 400 son un suplicio… pues casi que lo dejo pasar. No se puede leer todo y estas entradas de descartes vienen muy bien de vez en cuando.
¡Muchos besos!
Bien!!! uno que no va a la lista, jajaja!
Isi aún así admiro tu capacidad para terminar lo que empiezas y además veo que ahora además de fotos de tu preciosa ciudad nos pones en contexto los libros, gracias!
Me encanta la novela histórica bien escrita ya que me permite repasar y preparar viajes, o dicho de otra forma viajar leyendo. Pero, claro, con unos minimos, hay algunas que no sólo son aburridas, sino que ni siquiera se molestan en adaptarse al lenguaje y conocimientos de la época….y son un mezcladillo….
Un abrazo de guisantes 😉 (tendrá que ser mucho más cuidadoso que el abrazo de oso, ya que somos frágiles, jijiji);-)
El Guisante Verde Project
Uno menos que apuntar. De todas formas no me llamaba su argumento. Así que tampoco hubiera caído.
Besos.
¡No me fastidies! jajaja. ¡Qué casualidad!
Te diré por qué: iba a poner en una reseña (al final no lo puse por no hacerlo tan largo), que con Maalouf, siempre cuando termino, me queda la curiosidad de una semilla que me ha sembrado. Cuando estuve leyendo “El desajuste del mundo” se lamentaba de unas comunidades que continuaban existiendo después de más de 2000 años, y se lamentaba que con la guerra de Irak, lo que antes se toleraba, ahora estuvieran violentando a esas comunidades, con ese estudio, parece ser que llegó a la Historia de Mani, con el libro también suyo de “Los Jardines de Luz”. Bueno, pues con este libro, me ha quedado que tenía que buscar la historia de la Reina de Palmira, Zenobia, que aunque finalmente sucumbió a al poder persa y romano, sin embargo, su recuerdo ha perdurado en el tiempo, más que incluso el de sus vencedores …… Y aquí llegas tú. Me traes una novela de ¡Zenobia! que voy a apuntar.
Y ahora, querida, voy a continuar leyendo la reseña. Abrazos
¡Qué chasco! la verdad que podía haberse mojado un poco, y poner al final lo que se sabe que es verdad y lo que es creación del imaginario del autor. Las cosas espesas no entran igual, que las que te lo dan con ameneidad.
En fin, habrá que pensar en otra cosa.
María: pues sí, a veces viene bien descartar un libro porque oye, ya son bastante los que nos llaman la atención, jeje.
Maribel: es que ya había sacado todos los recodos de la muralla romana en otras entradas, así que para esta lo que más pegaba era poner algo de Palmira, que para eso es el escenario principal de la novela. En todo caso, también he leído muy buenas opiniones de este libro, igual depende; os puede gustar… HOmbre, yo si viajara a Palmira, lo leería, ¡seguro! jajaja. Pero vamos, que no es muy ameno que se diga…
Tengo cuidado con el abracito de guisantito 😀
Icíar: ayyy pobre! Te imagino emocionada la principio de la reseña y luego con el humor por los suelos… oye, igual puede pasar que te interese tanto el tema que el libro te llegue a gustar, ¿quién sabe? Como le decía a Maribel, solo he leído reseñas positivas de él, así que puede ser que la “rarita” sea yo. Pero opino lo mismo que has dicho en el 2º comentario: no me importa que se inventen cosas para darle más emoción a la historia, y luego se cita al final lo que es cierto y lo que no. Pero en este libro, por ponerte un ejemplo, te cuento que en la bibliografía se habla de que Zenobia tuvo 3 hijos y luego dos de sus nombres dejan de aparecer (con lo que se supone que dos murieron siendo niños) y el autor de repente les enferma de fiebre y al párrafo siguiente se mueren así sin más… Vamos, que como novela no me ha gustado; como historia más o menos fiel a la bibliografía, supongo que no tendrá precio.
PD: si quieres te resumo la historia y ya está 😉
Un bodrio! Espero tu próxima recomendación.
Beso
Marcela
Leyendo tu reseña he recordado otro libro de época romana que se desarrolla en Palmira y que me gustó mucho: “Último acto en Palmira” de Lindsey Davis.
Marcela: ya ves que es imposible que nos guste todo 😉
Masteatro: Ummm no conocía ese que me dices, y la verdad es que me entra la curiosidad. Aún no he leído La plata de Britania, pero espero hacerlo pronto y, si me gusta, igual también me animo con el que recomiendas! Gracias!
Interesante tu reseña y muy sincera. Me sirve como lector y también como escritor, la verdad es que es un tema muy interesante y si lo ha tratado como dices, pues es una pena.
¡Bueno! Es que qué se puede esperar del cansino de José Luis Corral… 😉 No me leo un libro suyo de estas características ni muerta. En su favor tengo que decir que su rigor científico proviene de su trabajo como historiador y que tiene novelas muy entretenidas, como “El salón dorado”, pero no puedo con este señor.
Si quieres novelas preciosas ambientadas en la Historia Antigua, prueba con Colleen McCullough, la maravillosa “Memorias de Adriano” de Yourcenar o con Robert Graves. ¡Eso es escribir y lo demás tonterías? Y, si nos alejamos de Roma y nos centramos en Grecia, Mary Renault es una de las imprescindibles: cada una de sus novelas es una auténtica joya. 😉
¡Un abrazo!
Antonio: es que no podía poner otra cosa sobre el libro, no me ha parecido nada ameno… Si a alguien le sirve aunque sea para descartar lecturas, me parece perfecto!!
Alienor: joooo y yo qué sabía! 🙁 jajaja
El caso es que mi padre, que comenta más arriba, ha leído algunas novelas de José Luis Corral y le han gustado, aunque ahora que lo pienso mi padre deja muchos libros a medias y lo mismo estos ni los ha terminado y justo el principio se hacía interesante, jajaja.
Tomo nota de todas las recomendaciones que me estáis dejando en los comentarios, porque sí que me apetecía leer novelas históricas distintas de las de la Edad Media, y oye, todos coincidís en C. McCullough, así que será la próxima, creo yo.
No conoces a Corral, pobrecica mía, porque no vives en Zaragoza, que lo tienes en todos los sitios hasta en la sopa. 😉 Es profesor de historia medieval en la universidad de aquí y, aunque en lo suyo es muy bueno, a título personal puedo decirte que como librera lo he sufrido in situ y se lo tiene muy, muy creído. Y no puedo con las personas así, que se creen superiores. Para mí, el hombre sabio es el hombre humilde que te trata de tú a tú. Creo que, en este caso, la inquina personal me supera. 😉 Y ojo que, vuelvo a decirlo, conozco a gente de la que uno puede fiarse que me dice que tiene novelas muy muy entretenidas.
Creo que McCullough es una buena elección: te gustará. 🙂
¡Un besico gordo!
Alienor: jaja pues igual te pasa eso con él, que personalmente no es santo de tu devoción y eso te predispone hacia sus libros… negativamente, claro! Coincido en que, por muchísimo que sepas sobre un tema, tienes que dirigirte a la gente “del pueblo llano” con humildad, más que nada por tu bien (porque si no, igual no te soportan y no leen tus libros, jajaja, y puede que incluso alguna librera no los recomiende y los ponga el el peor sitio de la librería jijiji).
Pero bueno, ya ves que yo no tenía prejuicio alguno y que me apetecía mucho leer el libro, pero al final no me ha gustado…
Nada de ganas de leer este libro, jeje.
bsos!
ROsalía: pues a otra cosa, será por libros!!
Esta entrada además de recordarme que había estado en Palmira (¡Como pudo olvidárseme!) también me hizo recordar que una amiga me había dejado un libro suyo, ambientado en España y en la edad media , y lo dejé a la mitad porque me aburrió.
Y probablemente ya lo hayas visto o te lo hayan dicho pero Susana en el taller de lectura tuvo al “ínclito” en una mesa redonda sobre novela histórica.
Pues a mí como a tu padre, me ha gustado casi todo lo que he leído de Corral hasta la fecha, pero este no lo he leído. Así que si te animas con algún otro, yo te recomendaría “Numancia”.
Al final de la reseña me he reído un montón jajjaja, “hija, si lo tenías todo ya, menuda falta te hacía desafiar a Roma y encima nos quejamos…” Pues verás he pensado que si diríamos esto mismo de cualquiera de los Emperadores o Reyes de la historia jejeje.
Yo sé que leeré este libro pero si en la página 150 me muero, tranquila que tu ya has hecho lo que has podido por quitarme esta idea de la cabeza. Jajajajaj
Besicos!
Lammermoor: me pasé antes por la entrada de Susana, y ya veo que ella ha disfrutado de otros libros del autor (mi padre también, por cierto), pero hija, a mí no me ha convencido. Veo que tú tienes más o menos la misma opinión que yo acerca de su manera de relatar la historia: para mí bastante aburrida también.
Pero bueno, por lo menos he aprendido cosas, porque de Palmira no conocía ni el nombre!
Susana: me apunto mentalmente la recomendación, pero tendré que armarme de valor para leerlo, jeje, aunque igual sus otros libros no son tan extensos y los acontecimientos suceden de otra manera más amena (espero).
Con respecto a Zenobia, tienes razón; a todos podríamos decirles lo mismo, pero su caso es un poquito diferente: su marido era uno de los favoritos del emperador y ella echó su trabajo por tierra firmando la paz con los persas, contra los que su marido había luchado tantas veces. No sé, me parece que de verdad hubiera podido gobernar la mitad oriental del imperio si hubiera querido y, de hecho, era su cometido, pero no lo quiso hacer en nombre del emperador, sino en el suyo propio… Y mira: fue un desatino 🙁
Aparte no me gustaron los personajes, no tienen mucho fondo, son un poco pegotes.
Bueno, si lo lees y te aburre, te lo resumo yo en 5 minutillos 😉
Descartado. Amén.
Booki: pues eso, que de vez en cuando merece la pena saber cuál no vas a querer leer, jejeje.
Le había echado el ojo… pero trás leer tu comentario, creo que invertiré en otro libro. No me gusta leer letras juntas, por el mero hecho de llenar páginas. Y es que últimamente si la novela no supera las 400 páginas no se considera para el Top10. No hay más que mirar en las librerías…
Yago: totalmente de acuerdo con lo de los tochos. A veces con menos páginas, puedes hacer una historia mucho mejor que llenando hojas y hojas y aburriendo al personal. Yo no lo recomendaría, ya lo ves, pero si has leído algo más del autor y te ha convencido, igual este también te gusta (quién sabe!).
Uno que no me apunto, que también se agradece.
Un besito guapa.
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