Dos cautivos, de Lajos Zilahy
30 Oct 2011 por Isi
Hace ya un par de semanas que terminé el libro y, por falta de tiempo, no pude hacer la reseña; pero resulta que este tiempo de reposo ha influido positivamente en la valoración final al poder escribir sobre el libro desde una perspectiva más global.
Pese a la portada, que puede llevar a engaño, es una historia sobre dos enamorados cautivos, efectivamente, pero cautivos de sí mismos. Péter es un joven de familia humilde pero bien situado que, durante una fiesta de sociedad, conoce a Miett, una chica pelirroja bellísima del que queda prendado desde el primer instante. Poco a poco comienza a cortejarla hasta que el noviazgo entre ambos es oficial, con tardes de té, paseos por Budapest acompañados de una carabina, miradas cómplices, besos furtivos a escondidas de los demás… En fin, lo normal en aquella época.
Por supuesto, la relación va sucedida de su correspondiente boda. Los jóvenes novios deciden vivir en el piso de Miett. Todo les va bien; se quieren y se consideran en verdad felices, pero ya se sabe que lo bueno no suele durar mucho y, tras unos pocos meses de casados, comienza la Primera Guerra Mundial: Péter es llamado a filas. Ni aun en esta situación parece que se pueda estropear su felicidad puesto que, quizás por la publicidad o por los comentarios ajenos, se tiende a pensar que la guerra no durará mucho y que realmente los soldados no se enfrentarán a un verdadero peligro, pero resulta que así es.
Tras su última despedida, Péter es enviado a la frontera con Rusia y allí el ejército húngaro es vencido y los soldados hechos prisioneros. Es el principio de una larguísima separación que ninguno de los dos jóvenes se esperaba. El regimiento de Péter es conducido a Siberia, pasando de un campo de prisioneros a otro y siempre desplazándose hacia el este, cada vez más y más lejos de Hungría. Son relativamente afortunados, pues les destinan a un lugar bastante cómodo donde tienen autorización para salir a visitar el pueblo, aunque vigilados por soldados rusos, y a realizar actividades que les puedan reportar beneficios, como cultivar vegetales que luego vendían en el mercado. Además los habitantes rusos les tratan con respeto y cariño, cosa que de verdad me sorprendió muchísimo y me dio mucho en qué pensar: cuando salían de los trenes que les trasladaban a las prisiones, la gente el pueblo les esperaba para darles comida y bebida, ¿os imagináis? ¡A sus propios enemigos! Me pareció un gesto precioso.
Por su parte, Miett sigue viviendo con su padre, encargándose de la casa y realizando las mismas tareas cotidianas de siempre; enviando cartas a Péter (pues al principio sigue funcionando el servicio postal entre los países rivales) junto con algunas cosas que pudiera necesitar -pero que nunca le llegan, pobre-. Por su parte, Péter es más escueto pero no por eso deja de sufrir al estar separado de Miett. Ambos tratan de actuar como siempre, sin hacer un drama ante su situación, pero sufriendo íntimamente; haciendo como si no pasara nada, como si mañana mismo pudiera ser el día de su reencuentro.
Pero, ¿qué pasa cuando van pasando los años, cuando el servicio de correo se suprime durante meses y meses, cuando no sabes si el otro está vivo o muerto? ¿Cómo se puede uno proteger de esa situación? Me daba mucha pena cuando salió a colación la idea de que llevaban más tiempo separados del que habían estado juntos.
Es un libro que retrata a la perfección a estos dos personajes y todo el ambiente húngaro de principios del siglo XX. Está escrito a un ritmo muy pausado que requiere bastante atención por parte del lector, por eso no lo recomiendo para una época ajetreada en la que uno quiera leer para “desconectar”. Yo no lo disfruté al 100% porque los días en los que apenas podía leer 30 minutos me aburría y, sin embargo, los fines de semana me entusiasmaba la lectura y me pasaba horas y horas absorta en la historia de Péter y Miett. Por eso digo que es un libro al que hay que buscarle el momento para poder disfrutarlo.
Es curioso cómo el autor plasma de la separación: las líneas están llenas de angustia, de incertidumbre; de hastío, llegado el momento… Icluso la extensión de esta parte de la historia es bastante proporcional en cuanto al número de páginas al tiempo de cautiverio de Péter, ayudando todavía más a recrear las sensaciones de los personajes; esa lucha interna por mantener unos sentimientos que van cambiando a lo largo de los años.
El mismo autor fue reclutado para luchar en la Primera Guerra Mundial, tras lo cual escribió este libro basándose, por supuesto, en su experiencia. La primera vez que se publicó en España en los años 40 le pusieron el título de Las cárceles del alma, pero creo que ha sido un acierto recuperar el título original (aparte de las partes del libro que fueron censuradas, por supuesto) porque realmente es la historia de dos cautivos.
Yo creo que es un libro que merece la pena, pero ¡ojo!: buscadle un hueco apropiado.
Páginas: 736 Precio: 24,00 €
Propósito personal: no lo cumple RETO2011: Y, Itrio
Me llama la atención, pero ahora mismo creo que no lo leeré… seguiré tu consejo y le haré un hueco en el momento adecuado
Besos
Lourdes
A veces hay que dejar reposar un libro para apreciar mejor las sensaciones que nos ha provocado su lectura.
El libro, en estos momentos, no me llama mucho la atención.
Besos
Hola Isi, una de las obras más conocidas del autor de “Los Dukay”, me gusta que hayan recuperado el título original, igual que pasa con Sandor Marai y su libro más conocido “El último encuentro”, en realidad se titula “A la luz de las velas( o de los candelabros)”…. Lo cierto es que en todas las críticas, antologías, conferencias se habla de “Las carceles del alma”, así que me gusta tu aclaración. De mi pasión por los húngaros no digo nada más…. Si ves las polvorientas ediciones que me han dejado para que les haga de niñera hasta la vuelta de los dueños…
Me gusta la foto con el dibujo, parece de Doctor Zivago ilustrado por Hugo Pratt, jejeje!
Un abrazo 😉
No conocía el libro pero parece una lectura muy interesante, aunque si tiene un ritmo pausado buscaré un periodo con vacaciones o días libres para embarcarme en su lectura
un beso!
Lourdes: bueno, es un novelón, pero hay que tomárselo despacito en una época de calma. Tiene un final aluncinante!
Laky: pues sí, hay veces que uno lo ve de manera distinta cuando han pasado unas semanas. Siento que no te llame mucho, porque es una historia muy chula, pero bueno, para gustos…
Maribel: he visto en la solapa lo de la trilogía de Los Dukay, y sospecho que lo reeditarán pronto (o eso espero); los quiero leer, por supuesto! 😀
Me imagino perfectamente esas ediciones antiquísimas, de la época de la posguerra, todas censuradísimas (no sé para qué los publicaban, la verdad!) y que se rescatan de las librerías de libros antiguos. Lo de cambiar los títulos es algo que se escapa a mi entendimiento, y ya no te digo el tema de la traducción de los nombres…. Vi una reseña de este libro donde se hablaba de “Pedro y Miett”. ¡¡Qué manía tenemos en España de traducirlo todo, por dios!! Eso sí: los títulos, en lugar de traducirlos, mejor nos los inventamos 🙁
Bueno, ya ves que es un autor que me está gustando muuuucho.
Tatty: sí, es mejor que sea una época tranquila, porque este es un libro para saborear, no para desconectar. La historia es preciosa y el final me encantó.
No conocía el libro pero me ha llamado mucho la atención. Aunque te haré caso, que últimamente mi ritmo lector ha disminuido bastante. No ando muy centrada últimamente. Así que me apunto el libro para mejores momentos.
Besotes!!!
No conocía a este autor, pero he saboreado cada línea de tu reseña, quedándome ya prendado de los protagonistas y de su difícil historia (sin duda, de superación). Así que lo anoto para futuras lecturas. ¡Gracias por el descubrimiento! ¡Besos!
¡Muy buena reseña! Por lo que cuentas, el libro parece interesante. Pero, hace poco tiempo he empezado un libro con un argumento similar (aunque no se centre en el romance entre dos personas), de ritmo pausado y que habla de un país casi desconocido en la literatura: Bulgaria. Así, y aunque este me llame la atención, creo que, por el momento, no puedo entregarme a otro libro con semejantes características.
La verdad es que no me atrae mucho, pero si dices que está así de bueno… pues, habrá que considerarlo 🙂 Es verdad lo que dices: a veces hay que dejar pasar un tiempo para comprender bien un libro. Por ahora no tengo planeado comprar nada, después de la feria del libro, ya te imaginarás… xD
Saludos 🙂
Margari: estamos igual; sin tiempo para plantarnos en el sofá durante una hora seguida para leer algo. Qué pena!! En fin, ya te digo que este libro es para disfrutarlo con tiempo y calma. La historia es muy bonita; ya lo verás si te animas y, además, siempre es un lujo que podamos disfrutar de una novela que hasta hace muy poco nos habían censurado.
Jesús: es que a Lajos Zilahy lo tradujeron allá por los años 40 en España, y luego se le dejó en el olvido hasta hace muy poco, cuando han vuelto a traducir y reeditar algunas de sus novelas (y sospecho que esta editorial continuará hasta completar la Biblioteca Lajos Zilahy). Vamos, que nuestra generación no tenía por qué conocerle 😉 El caso es que merece la pena; la otra novela larga suya que leí, El alma se extingue, me gustó mucho también.
Offuscatio: también me había pasado por la cabeza la idea de que hay muchos países sobre los que no leemos nunca nada, “desconocidos en la literatura”, como bien dices. Pues estoy deseando saber de qué libro se trata, a ver si me lo apunto!! 😀
Pablo: espero que no te importe que te lo diga, pero quizás siendo tú de los más jovenzuelos de los que pasan por aquí, igual el libro es demasiado pausado para que te le saques tanto gusto como a otros libros. Déjalo para más adelante, que igual te apetece más 😉
Te comprende, yo tambien necesito digerir las lecturas. No conocía el libro pero por tu reseña veo que merece la pena hacerle un hueco. Un saludo
Después de leerte creo que ahora no es el momento adecuado para este libro peroooo, se le puede buscar. Me ha gustado
Besos
YO no conocía ni el libro ni el autor pero tu reseña me ha resultado muy esclarecedora. Creo que, ahora que cuento con tiempo, podría ser una lectura ideal. e lo apuntaré. Gracias guapa.
Buena reseña, no solo el libro parece interesante, sino que tu recomendación sobre cuándo/cómo afrontarlo se agradece.
Yo también creo que hay ciertos libros que requieren un momento muy concreto.
Lo de creer que la guerra (la que sea) va a durar poco, se ve que ocurre siempre, por lo menos se ve en casi cualquier libro/película sobre el tema, ahora mismo me estoy acordando de “Lo que el viento se llevó”, por poner un ejemplo conocidísimo.
Olga: sí, creo que es un libro a tener en cuenta. Espero que te guste!!
M.: jejeje bueno, es que todas tenemos épocas más “moviditas” para las cuales hay lecturas que no valen. La historia es muy bonita, ya lo verás 🙂
Eva: pues es un autor que se publicó hace 50 años y luego le abandonaron, y todo eso teniendo en cuenta que, en su momento, se censuraban partes de sus novelas (en esta, por ejemplo, cuando habla de que Miett disfrutaba en la cama con Péter, cosa muy escandalosa, ya ves: ¡prohibido disfrutar del sexo!). En fin, espero que te guste si lo lees.
Loque: me acuerdo de otras recomendaciones que me hicieron a mí sobre otros libros referentes al momento de lectura que me valieron de mucho también. Es que de verdad que durante la semana se me hacía cuesta arriba el librito, y luego el finde no lo soltaba!!
En cuanto a la guerra, el libro tiene un par de cosas muy interesantes, sí. Lo de publicitar que en un santiamén acabaremos con los enemigos debe de ser muy típico… Y luego el recibimiento de los soldados húngaros en Rusia me dejó alucinadísima: supongo que les trataban tan bien esperando que los húngaros también trataran así a los soldados rusos capturados, supongo. Me daban ganas de llorar de alegría cuando bajaron del tren y la gente les daba comida, de verdad. ¡Qué cosas!
Ahora mismo lo que necesito son lecturas ligeritas y que me sirvan para desconectar, así que de momento dejo pasar este libro, aunque no lo descarto porque me ha parecido interesante.
Besos!
Kristineta: te entiendo perfectamente, no siempre un libro es adecuado para cada momento.
Pues me parece ina buena elección. Todo lo que cuentas me gusta y además lo necesito, porque no conozco mucho de esta época y debería: la 1 GM en esa parte de Europa y Rsia.
Creo wue normslmente, este tipo de libros necesitan de toda tu atención. Así que quedo avisada.
Un zbrazo
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Icíar: me alegra que te hayas animado porque es una historia muy bonita, ya verás. Hablando de la I Guerra Mundial, tengo pendiente el nuevo de Ken Follet, que también trata este periodo. A ver si le doy un empujoncito 😉
Besos!!
Ya tenía apuntado al autor de otra reseña que habías hecho así que tarde o temprano lo cataré. Este me llama también muchísimo (soy una romántica, que le vamos a hacer) pero voy a tardar bastante en encontrar hueco para esas más de 700 páginas.
Elwen: pero no te pienses que es una novela “actual”, te lo digo porque el ritmo es lento y se te puede hacer pesado si lo lees pensando que va a ser de otra manera. Pero es una historia muy bonita 😀 El final me encantó; no me lo esperaba para nada!!!
Uhmmm! Suena a lectura invernal, con taza de café, chocolate o infusión al lado. No creo que vaya a comprarlo ya, pero seguro que si me cruzo con él me lo traeré para casa, pensando en esas tardes invernales que tanto me gustan.
Besos
Puf! Gracias por la reseña, porque la portada me parece muy sugerente pero el argumento no me llama naaaaaada!
Uno menos a la lista. Bien!
Isi, estoy leyendo “Solo” de Rana Dasgupta, un autor de origen indio a escribir sobre Bulgaria (eso fue lo que me llamó más la atención del libro)…pero va a ritmo lento la lectura. Aunque la escrita es maravillosa, la historia es algo pausada y prima la narrativa o la descripción por encima del diálogo. A ver si me consigue sorprender a la medida que llegue a un punto más avanzado!
Booki: exacto, ese es el momento óptimo para esta novela!! A ver si tienes tiempo de disfrutarla como se merece!!
Marta: pues mira que la portada a mí no me llamaba nada (esa foto de soldados, como que no me va). Bueno, espero que dure este respiro al plan infinito 😉
Offucatio: más o menos como este libro, por lo que comentas, por eso no son aptos para “entretenimiento y desconexión de la vida cotidiana”. A ver si finalmente se anima la cosa, que seguro que sí. La verdad es que a veces es un placer el simple hecho de conocer cosas sobre otros países más abandonados en la literatura, verdad?
Besos festivos a todas!!
Que triste… Se ve lindísimo, pero me va a romper el corazón… Algún día lo leeré… Tendré que buscar el momento apropiado, como dices que lo haga
Besines
Shanny: yo creo que te arrancará alguna lágrima 😉 Es una historia muy bonita, ya lo verás!
Isi, mire el título y la portada de este libro que reseñabas y salí del blog porque pensé que no sería de mi estilo, pero volví a entrar movida por la curiosidad y me ha encantado tu reseña!!
Tienes razón en tu primera frase que la portada lleva a engaños si fuera por ella no me acercaría, parece de otra temática no se…
Me encanta de que va, en un principio me ha recordado a Un secreto bien guardado pero esta se ve que es más real y más triste y desgarradora.
La buscaré porque me gustan mucho las historias de este estilo y porque ahora me queda la curiosidad de saber que pasa con esta pareja de enamorados después de tanto tiempo.
¡Gracias por la recomendación!
Un beso
Dácil
Dácil: la historia en sí te va a encantar, pero el estilo del autor ya es otra cosa; ten en cuenta que está escrito hace casi un siglo y que, pese a ser un lenguaje actual, no es ni ágil ni rápido, sino que las cosas sucenden lentamente y están muy trabajadas. Lo digo porque tú estás acostumbrada a cosas muy actuales.
Pero claro, la historia es muy bonita; el final no te lo esperas para nada!!! 😀
Entre lo mucho que publicas, lo intratable que esta google y que le ha dado un yuyu a mi ordenador (a ver si me lo reparan) solo puedo seguirte de reojo y me quedan los comentarios pendientes pero… en esta entrada me planto.
Aún no leí a Zilahy -lo tengo en el punto de mira, más tras tus comentarios elogiosos- estuve a punto con Los Dukay, que me había recomendado Marible aunque al final me decídí por Banffy.
La literatura húngara, a la que me acerqué como preparativo para mi viaje a ese páis, ha sido todo un descubrimiento y pienso seguir leyéndola. Tengo que mirar si tienen estos libros en la biblio (o si no, pedirles que los compren)
T
Pues nada, me lo tendré que apuntar, lo has pintado demasiado bien. Eres una mala influencia para mi reto personal, que lo sepas.
¡Qué fuerte que censuraran partes en España! Pero tiene contenido subidito de tono, ¿o qué?
¡Un beso!
Lammermoor: mujer, no te preocupes y lee cuando quieras/puedas 😉
Es un autor que te va a gustar. Yo he leído solo 3 novelas y la verdad es que creo que esta es la mejor, aunque “El alma se extingue” también me gustó mucho. Tengo ganas de que reediten la trilogía de Los Dukay, porque tengo las expectativas muuuy altas.
Ahora también seré yo la que me apunte a Banffy en el plan infinito, porque no le conocía!!!
Lady: jaja a mí me pasa igual con vuestros blogs, para qué negarlo. En cuanto a la censura, resulta que los recién casados hacen en la noche de bodas lo que hacen todos los recién casados, y además resulta que a Miett le gusta… ¡¡Qué indecencia por dios!! 😉 Ayyy menos mal que hemos nacido en esta época, de verdad!!
Pues yo creo que este le dejo pasar. Desde luego ahora no es el momento adecuado para mi.
Bonita reseña.
Besos!!
Pi: bueno mujer, si no te apetece, pues nada! A otra cosa!
La verdad es que a mí me ha gustado mucho la historia 🙂
Tengo apuntado a este autor desde que hiciste la primera reseña de una de sus novelas, así que a ver si me animo pronto a leerlo.
¡Besos!
Luisa: pues eso, a ver si te animas, que creo que merece la pena y te va a gustar, de verdad!!